Ikigai es un concepto japonés que se traduce aproximadamente como tu “razón de ser”. Este ejercicio está inspirado en un marco de trabajo compartido por Mark Manson (autor de “El sutil arte de que te importe un carajo”).
Solo te tomará unos 20 minutos completar estos 4 pasos, ¡pero es sorprendentemente efectivo! También puedes ver este post con las 11 leyes del Ikigai.
EL MÉTODO
Coge un bolígrafo y papel.
También puedes usar esta plantilla editable en Miró (aunque está en inglés) o descargar y editar esta de Dandy People.
Paso 1: ¿Qué te encanta hacer?
Anota todo aquello en lo que disfrutas invirtiendo tu tiempo. Sé lo más específico posible: grande, pequeño, incluso placeres medianos. Haz una lista larga. Piensa también en tus favoritos de la infancia.
(Puntos extra por cosas que te encanta hacer que a la mayoría de la gente no le gustan).
Paso 2: ¿Por qué te podrían pagar?
Repasa la lista y tacha cualquier actividad por la que probablemente sea difícil cobrar (por ejemplo, tomar siestas, comer tacos). Sé que te dije que enumeraras TODAS tus alegrías, pero principalmente fue para hacerte consciente de cuántas tienes.
Paso 3: ¿En qué eres hábil?
Revisa lo que queda y pregúntate: ¿en qué eres mejor que el 90% de las personas? (¿O al menos en qué estarías dispuesto a trabajar para ser mejor que el 90%)? Otra forma de verlo es… ¿en qué te piden ayuda o consejo las personas en tu vida?
Tacha las opciones que no se apliquen.
Paso 4: ¿Qué es bueno para el mundo?
Último paso: encierra en un círculo las cosas que puedan tener un impacto positivo en otras personas. De cualquier manera. Grande o pequeño.
Tacha el resto.
Ahora, mira lo que encerraste en un círculo. Esta combinación te ayudará a descubrir tu ikigai.
POR QUÉ FUNCIONA
Buscamos la intersección de:
- Lo que amas
- Por lo que te pueden pagar
- En lo que tienes una habilidad única
- Lo que es bueno para el mundo
La intersección de esos cuatro es la versión occidentalizada del “ikigai”.
Esa combinación es única para ti. Lo que significa que tienes una ventaja significativa para lograrlo.
Después de todo…
“Nadie puede competir contigo por ser tú”. – Ravikant nava